Introducción a la Ingeniería de Sistemas : COULD COMPUTING

COULD COMPUTING

julio 08, 2023

La computación en la nube (cloud computing) se refiere a la entrega de servicios de cómputo, como servidores, almacenamiento, bases de datos, redes y software, a través de Internet. En lugar de tener recursos de TI locales o servidores físicos, los usuarios pueden acceder a estos recursos a través de proveedores de servicios en la nube.

La computación en la nube ha estado en desarrollo desde la década de 1960, pero ha experimentado un crecimiento significativo y una mayor adopción en los últimos años. Algunos de los proveedores de servicios en la nube más conocidos son Amazon Web Services (AWS), Microsoft Azure, Google Cloud Platform (GCP) y IBM Cloud.

Características de la computación en la nube:

Acceso bajo demanda: Los recursos en la nube están disponibles según la demanda del usuario. Esto permite a las organizaciones escalar recursos rápidamente en función de las necesidades cambiantes, lo que resulta en una mayor flexibilidad y agilidad.
Autoservicio: Los usuarios pueden solicitar y aprovisionar recursos de manera autónoma sin la necesidad de una interacción directa con el proveedor de servicios en la nube. Esto proporciona una experiencia más rápida y conveniente.
Elasticidad: La computación en la nube permite escalar los recursos hacia arriba o hacia abajo según sea necesario. Los usuarios pueden aumentar o disminuir la capacidad de almacenamiento, potencia de procesamiento y ancho de banda de manera dinámica, lo que optimiza la utilización de recursos y los costos asociados.
Pago por uso: Los servicios en la nube generalmente se facturan según el modelo de pago por uso. Los usuarios solo pagan por los recursos que consumen, lo que puede ser más rentable en comparación con la inversión en infraestructura local.
Virtualización: Los proveedores de servicios en la nube utilizan la virtualización para crear y administrar múltiples máquinas virtuales en un solo servidor físico. Esto permite una mejor utilización de los recursos y una mayor eficiencia.
Escalabilidad: La computación en la nube ofrece una escalabilidad horizontal y vertical. La escalabilidad horizontal implica agregar más recursos (como servidores) para manejar cargas de trabajo crecientes, mientras que la escalabilidad vertical implica aumentar la capacidad de recursos existentes (como aumentar la capacidad de memoria de un servidor).
Alta disponibilidad y tolerancia a fallas: Los servicios en la nube generalmente están diseñados para garantizar la disponibilidad continua de los recursos, incluso en caso de fallas de hardware o interrupciones en un centro de datos.

La computación en la nube se utiliza en una amplia gama de aplicaciones, desde alojamiento de sitios web y almacenamiento de datos hasta ejecución de aplicaciones empresariales y análisis de big data. Ofrece ventajas como la reducción de costos de infraestructura, la escalabilidad según las necesidades, la capacidad de respaldo y recuperación ante desastres, y la posibilidad de acceder a recursos y servicios desde cualquier lugar con conexión a Internet.